Desde que desperté, al bajar de la cama, lo hice con el pie
izquierdo, en ese instante dije en mi interior: chin! "Esto es un mal augurio
para lo que me espera el día de hoy”; de inmediato lo comprobé al verificar mi
billete de lotería en la lista del periódico TRIBUNA y comprobar con tristeza
la realidad que tiene el adagio aquel que dice: “quien juega por necesidad,
pierde por obligación”. Ni reintegro saque. Ni modo, quizás en el sorteo de hoy (domingo) si tenga mejor suerte,
me señale en mi introspección y después de un saludable desayuno compuesto por
2 tortas de cochinita de Lalo, en el mercado Morelos, y un tentempié por
ahí de las once del día compuesto por un
delicioso consomé de barbacoa de ¿borrego?, llevando como digerible un
refresco de cola light, me imbuí en ese defecto, (el cual mi madre dice que es
una virtud) que
tengo desde la niñez y devoré los periódicos para buscar algo que llamara mi atención,
horas antes, por el internet ya había revisado dos de circulación nacional.
Nada fuera de lo común solo que el nieto de Juan Gabriel se murió de un pasón.
Caray, eso de adoptar hijos adolecentes tiene sus consecuencias por la ausencia
paterna en la niñez y otras minusvalías que no vienen al caso.
Ya tenía todo preparado para el controversial primer día de
la semana, según los luteranos, o el séptimo, como lo señala el canónico
católico: mis palomitas, light también, caztacan y chicarrón rico en triglicéridos, dos barras chocolate,
un paquete de fresas y mi dotación
diaria de refresco de cola: tres litros. Muy saludable para ese día de reposo,
reflexión y , desde luego de toros y el esperado debate entre los candidatos a
la Presidencia de la República, casi nada, el futuro de país expuesto por tres
hombres y una mujer, en canales de empresas de cable, inaccesibles para la
mayoría de la población del país, en particular, casi 24 millones de habitantes
en una nación que tiene posicionado entre los más ricos del mundo a un
prestanombres de Salinas; al terror de Calderón y a quien Fox le abrió las
puertas de la prisión de “alta seguridad” donde purgaba su condena y, desde
luego, a los dueños del duopolio
televisivo, mismos que se negaron a transmitir en televisión abierta el amañado
debate.
El día siguió su curso y la ansiedad hacía presa de mi
persona: “ya coño!!!, que empiece la corrida de toros en unicable”. Ni el
tafil me hacia efecto y para mi mala fortuna, solo un especial taurino de media
hora y nada mas de fiesta brava. Carajo, el día sigue mal y como buen
supersticioso que soy de inmediato vino a mi mente la imagen del peje y su
posible despeñadero. No, no creo que sea para tanto me dije a mí mismo.
Recostado en mi King Size
, ejercitando el dedo pulgar de mi mano izquierda (la otra se dedica a
acicalar zonas impronunciables en este espacio) con el control de mi televisión
tratando de hacer tiempo para que llegara la hora del ansiado debate y sin
entrar a los canales donde estaba boicoteado el mismo y se transmitía futbol y
un programa de niños cantantes, ideal para analfabetas funcionales, grande fue
mi sorpresa al percatarme de algo rescatable en la TV: una película del Santo el
enmascarado de plata, mi eterno ídolo y que tanta falta nos hace, combatiendo a
los villanos capitaneados por el actor
argentino de inolvidables recuerdos, Wolf Ruvinskis. Aleluya, al fin algo que
mitigue la adrenalina que corre por mi cuerpo.
Ya compenetrándonos en el debate, vi a un Enrique Peña Nieto
nervioso, rijoso y con un evidente tic nervioso en el ojo izquierdo que
delataba los latidos de su corazón y las anginas en la garganta. A un Andrés
Manuel López Obrador que sus únicas intervenciones buenas fueron las dos
últimas. A una Josefina Vázquez Mota que parecía que estaba grabando spots y a un Gabriel Quadri que según los
politólogos internautas, ganó el debate,
proponiendo disparates como el que el
internet y la banda ancha sean considerados un derecho humano y que se reforme
la constitución para tal propósito. Seguramente en un país donde hay 24
millones de habitantes que sobreviven con menos del salario mínimo, van a tener
para comprar una computadora o ya de menos, para pagar la energía eléctrica,
además de que le sirvió de Patiño a EPN para golpear a AMLO cuando hacia alguna propuesta cuestionable.
La verdadera ganadora del debate se llama Elba Esther
Gordillo Morales, dueña del partido que tiene como candidato a un hombre
preparado, hábil para la lid pero que no deja de ser un polichinela de la
cacique magisterial quien de esta forma, logra su objetivo de conseguir una
votación mayor al dos por ciento y de esta manera, seguir conservando el
registro, las canonjías y el poder político de su franquicia partidista.
La peligrosísima y siniestra inteligencia de la culpable de
la paupérrima educación de nuestro país fue la ganadora y desde luego, la
edecán con su escultural cuerpo, lo demás, lo demás, es lo de menos. Seguimos
igual: EPN perderá unos puntos, Quadri ganara dos o tres y AMLO y JVM seguirán
peleando el segundo lugar a menos que suceda algo inesperado o un milagro, como
bien diría ese emulo de Cantinflas llamado Vicente Fox de Sahagún. No coman
cuentos ni crean en los santos reyes en plena primavera.
Lo prometido es deuda, les dejo el enlace de la edecan:
http://www.record.com.mx/galeria/tmd/julia-orayen-la-edecan-del-debate
http://www.record.com.mx/galeria/tmd/julia-orayen-la-edecan-del-debate
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