Con esto de las redes sociales, todos
nos hemos vuelto todólogos, vaya, hasta gente que escribe y opina, sin el menor
rubor de cualquier tema, juzga, lápida con severidad pero dando muestras de su
no
conclusión de sus estudios primarios, para pena ajena con los horrores ortográficos en que manifiestan sus conocimientos empíricos de cualquier asunto, sea este local, Nacional, Internacional, Mundial y Universal. Tirios y Troyanos se enfrascan en defender lo que sus neuronas le permiten y eso es bueno, es una forma de ejercicio para que no se les atrofien.
Entrando en el tema y como yo me
incluyo en lo antes señalado, los hechos suscitados en los bajos del Palacio
Municipal y en Isla Aguada no son al azar, el política no existen las
coincidencias y fueron las primeras señales para que el párvulo Presidente
Municipal, Pablo Gutiérrez Lazarus sienta lo que es amar a Dios en tierra
Apache y, además, poner de manifiesto su incapacidad que pretende disimular con
una arrogancia cobijada cual fingida sonrisita que raya en el cinismo, la misma
que utilizó con los deudos del New Divine.
Comentan los allegados al primer círculo,
que su titiritero, Juan Mendoza Vior, ya mando a pedir un moderno Dron e
incrustarle en el oído, aclaro, un chícharo y de esta forma, girarle
instrucciones ante situaciones álgidas, de esas que van a abundar. Mendoza Vior
ya también envió a buscar al Marista que le da terapia Psiquiátrica en virtud
de que le puedan dar más frecuentes sus ataques de Neurosis y principios de
Esquizofrenia, lo anterior no es pitorreo, es cierto y quienes lo afirman con razón,
abundan.
Usted, amable lector, cree que los
sucesos del Palacio y de Isla Aguada fueron fortuitos? La insensibilidad de
Gutierritos al despedir a secretarias de confianza y poner a disposición a
sindicalizados, no iba a generar la inconformidad de los afectados, jummm, dígamelo
a mí. Y en la bella Isla Aguada, pretender
robar el legítimo triunfo del luchador social, periodista y ya dos
veces, primera autoridad, Martin Ramirez Barrera, era obvio que sus
simpatizantes defenderían su voto a diestra y siniestra. Hicieron bien las
autoridades estatales de no intervenir, no es de su incumbencia y Alejandro
Moreno Cárdenas, aparte de ser un hombre de palabra, es respetuoso de la ley,
su trayectoria lo respalda.
Lo cierto es que mientras gutierritos
se la pasa en eventos sociales, inauguraciones y cosas intrascendentes, Juan
Mendoza Vior ya colocó a sus piezas en sitios estratégicos, donde fluye el
dinero y, comenta extraoficialmente, está siendo asesorado por el mismísimo Enrique
Iván González López- ya con solo una de su harem- y le está suministrando
cuanto tienen que caer para la bolsa, cuanto para la tesorería y cuanto para el
que recauda. Oficinas como Catastro, Gobernación, Desarrollo Urbano, Tesorería,
Unidad Administrativa, Obras Públicas, son algunas de las mas productivas, sus
titulares antecesores ahora hasta con manteca comen. Hasta la próxima.
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